Todavía cuando fue mi practicante y me dijo: "Cuando me case quiero que me organices mi boda, puedes hacer lo que te ocurra".

Y así fue.

Me dio carta blanca para dejar volar mi imaginación (dentro de un presupuesto claro).

Por un lado, era una gran responsabilidad ya que era mi gusto y no el de ella, pero por el otro lado tuve la mejor experiencia y me encantó trabajar con ella y su mamá. Sus energías me ayudaron a inspirarme.

Hielo y luz fueron mi tema. A pesar de sonar frío fue una boda muy cálida. Las familias se entendieron de maravilla, hasta los "exs" se llevaron como los mejores amigos.

Uno de mis miedos más grandes era  que cuando los invitados buscaran sus tarjetas con el numero de sus mesas, las tiraran al piso y todas se confundieran entre s, y todos  los invitados terminan en el piso buscando sus nombres.

En esta ocasión decidí poner las tarjetas en otra parte para evitar complicaciones. Gravamos  con luz los nombres de los invitados en grandes rollos imitando papel antiguo iluminados en la parte de atras, dando un efecto espectacular.

También usamos hielo en los arreglos florales, pusimos las flores dentro del hielo. La luz del lugar le dio un efecto muy especial, a pesar que el fotógrafo estuvo listo a estrangularme cuando se dio cuenta que no había luz para tomar las fotos. 

Tal vez era yo la que lo quiso ahorcar cuando encendió las luces para hacer su trabajo.
 
Todo salió de maravilla incluso cuando el padrino de la boda estaba parado en el lobby tratando de contratar a una niñera mientras hablaba con dos extrañas. Menos mal esas dos extrañas éramos Camila, una de las miembro del equipo de Indigo y yo. Le encontramos una niñera en un momento y le hicimos prometer que nunca volvería a pedirle a un par de extrañas que cuidara a su bebé (Si su esposa supiera)

De cualquier manera, Karen y Craig estaban fascinados con su boda. Sus palabras me hicieron llorar. Esto sucede a menudo porque en realidad me uno mucho a mis clientes y en muchas ocasiones nos volvemos amigos cercanos. Y siempre me hacen mucha falta cuando el evento se acaba.